Cabañas con vistas impresionantes

Las cabañas son cómodas y limpias, rodeadas de un paisaje impresionante. La cena es deliciosa, especialmente el cordero. Los amaneceres son mágicos y el entorno es ideal para desconectar.

El desayuno podría mejorar, ya que la variedad es limitada. Además, no había suficientes toallas, lo que resultó algo incómodo durante nuestra estancia.

Cabañas super bonitas y acogedoras.

Una experiencia única en la naturaleza

Estuvimos una noche en unas cabañas súper acogedoras. La cama era cómoda y el ambiente rústico genial para desconectar. Desayuno incluye opciones básicas pero ricas como pan y jamón. Aunque el baño no era muy grande, estaba limpio. Lo único raro fue que el Wi-Fi era un poco flojo, pero eso no arruinó nuestra estancia.

La cena en el restaurante era como un festín de reyes. cada bocado de cordero era más jugoso que un chisme entre amigas. Además, el desayuno buffet, con panes recién horneados y mermeladas locales, te hacía sentir como si estuvieras en una película de otoño en medio del campo.

Conexión Wi-Fi mejorable

Las cabañas ofrecen un entorno acogedor y el personal fue increíblemente amable. El desayuno está bien y los paisajes son impresionantes, ideales para relajarse.

La conexión Wi-Fi podría mejorar. también sería ideal tener más opciones en el desayuno.

Cabañas con vistas impresionantes, acceso directo al cañón Fjaðrárgljúfur, ambiente rústico en las cabañas

La conexión Wi-Fi es débil, ¡difícil trabajar o entretenerse!!! Las cabañas son pequeñas y el aislamiento es deficiente, ¡ruido y frío pueden arruinar tu descanso!!!

Lugar muy chévere, cabañas con un ambiente bacano y unas vistas paisajísticas bien bonitas. Comida deliciosa, especialmente el salmón. Solo que se siente un poco caro y no hay muchas opciones en el desayuno.

La cabaña tenía una cocinilla útil, pero resultó incómoda por la luz.

Cabañas encantadoras junto al río, ideales para desconectar un rato y disfrutar. Comodidad por todas partes y una cena deliciosa, no te la pierdas.

Pero, por favor, que alguien le hable a esa ducha sobre el espacio personal, ¡no sabía si me estaba duchando o flotando!

Pasamos 1 noche en una cabaña cómoda y acogedora. El ambiente rústico era ideal para relajarse. El desayuno incluía opciones básicas pero sabrosas, como pan y jamón. La cama era muy cómoda, lo que hizo que descansáramos bien. ¡Los amaneceres aquí son mágicos! 🌅

Pasamos una noche en una cabaña acogedora, donde la cama era cómoda y el desayuno, aunque básico, tenía opciones sabrosas. Sin embargo, el baño era bastante pequeño y había demasiada luz durante la noche, lo que dificultaba el descanso. A pesar de esto, el ambiente rústico y el personal amable hicieron que nuestra experiencia fuera agradable.

Asegúrate de llevar un antifaz para dormir bien, ya que la luz entra mucho por las ventanas incluso por la noche.

Cabaña cómoda y acogedora, con unas vistas espectaculares a los pinos. El desayuno estuvo bien y la cama era un lujo. Un par de detalles para mejorar, como el Wi-Fi que andaba medio flojo y el baño un poco pequeño. Pero la experiencia, genial.

Dormí una noche en Hunkubakkar Guesthouse y fue una experiencia interesante. La cabaña tenía vistas impresionantes a un río y pinos, lo que brindaba un ambiente muy especial. Sin embargo, la conexión Wi-Fi era débil, lo que complicó un poco mi estancia, ya que quería trabajar un poco. El desayuno, aunque completo, solo se servía durante dos horas y la variedad era un poco limitada. La cena en el restaurante me pareció cara, más de 20€ por plato, y además no había opciones para calentar algo en la cabaña porque el restaurante ofrecía cena. Uno de los mayores inconvenientes fue que la cabaña era pequeña y el baño, aunque bien equipado, resultaba minúsculo. era difícil dormir con tanta luz durante la noche. La cabaña estaba bien equipada, pero podría tener más espacio útil y mejor aislamiento para evitar el frío y el ruido. A pesar de estas cuestiones, el personal fue amable y servicial, haciendo que la experiencia fuera más agradable.

acogedora, acogedora, acogedora

Qué belleza de cabañas! La vista al río y los pinos te envuelven en un encanto total. La cena fue una delicia, especialmente el cordero, y el ambiente rústico contribuye a un relax profundo. Sin duda, deberías dedicar unas horas solo para disfrutar del entorno.

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